Nudos.

"...Pero, ¡qué temeridad es hacer un nudo y en seguida no saber cómo desenredarlo!"
Fabián Dobles Rodríguez.

Hoy he amanecido entre volutas de humo y sudor frío
Entre sábanas de lino y sombras oscuras danzantes...
Me aferro a estos últimos minutos, o quizá, estos nuevos instantes
porque ya no sé si la vida va hacia abajo o hacia arriba...

Notas melancólicas de un triste llanto pasado flotan en el aire,
las veo surcando la infinita paz que me rodea...
esa paz que viene después de que todo se va, esa falsa paz
que viene antes de una catástrofe y después de una guerra...

¡Ay! Como quisiera que los relojes ahogados dejaran de caminar
que se pierdan entre esas aguas profundas, esas que nadie ha de explorar.
Como quisiera remediar esos parches oscuros, esas paredes
agrietadas, estas manchas en mi inmaculada pintura fresca...

La Luna me sonríe con quieta tranquilidad desde mi ventana.
¿Cuánto tiempo ha pasado ya?
Me invita a vivir con ella, juntas por siempre hasta la eternidad...
Pero aún me quedan muchas horas tejiendo de colores marfil y negro,
desenredando nudos y punzándome hasta desangrar...